Reseña La Huella del Mal

 

TITULO: La Huella del Mal

AUTOR: Manuel Ríos San Martín

EDITORIAL: Planeta

PÁGINAS: 574

El hombre es un lobo que necesita que la sociedad le ponga freno con leyes y normas.

Sinopsis.

En una visita a Atapuerca, un estudiante descubre que una de las reproducciones que imitan los enterramientos prehistóricos es, en realidad, el cuerpo sin vida de una chica. La joven ha sido colocada con una simbología ritual, y todas las pistas apuntan a un homicidio ocurrido años atrás en otro yacimiento.

Demasiados detalles reuerdan al caso anterior, por lo que el juez reúne a los policías que se encargaron entonces: la inspectora Silvia Guzmán y Daniel Velarde, un expolicía dedicado ahora a la seguridad privada. Pero nadie sabe que en el pasado ambos vivieron una relación que tuvo mucho que ver con la truncada resolución del caso. Ahora tienen que colaborar y aclarar sus sentimientos para descubrir al asesino del  yacimiento, y cerrar aquella herida abierta en su pasado.

Los monos son demasiado buenos para que el hombre pueda descender de ellos. 

Opinión personal.

Bueno, lo he devorado, así tal cual, a pesar de no ser precisamente un libro corto, con sus más de 500 páginas, esta novela me ha atrapado entre sus páginas hasta el punto de no querer soltarla.

El libro engancha desde el minuto uno. En el primer capítulo empieza a notarse la tensión, que va in crescendo sin dar ni un momento de tregua y que se mantiene hasta el final. 

El ritmo de la investigación es brutal, llevándonos sin parar de un lugar a otro siguiendo, junto con los protagonistas, todas las pistas para poder esclarecer este caso tan peculiar.

En cuanto a los personajes, el autor ha construido unos protagonistas con unas personalidades muy marcadas y diferentes. Por un lado tenemos a Silvia, una mujer fuerte e inteligente, pero con algunas inseguridades que intenta disimular bajo esa fachada altanera. Y por otro lado Daniel, astuto y muy seguro de sí mismo.

De los personajes secundarios, destacar al inspector Rodrigo Ajuria, un hombre íntegro donde los haya, siempre a la sombra de Silvia. Me ha gustado mucho la evolución de este personaje que se ve arrastrado por las circunstancias. También a Inés Madrigal, la monitora del yacimiento que estaba con los chicos que encontraron el cadáver. Durante toda la novela se nos va mostrando y va guiando a los investigadores sobre los ritos y costumbres de la prehistoria.

En cuanto al final, ha sido espectacular. Nunca podría haber imaginado un final así, pero sin duda ha sido la guinda del pastel. ¡Menudo final!

En definitiva, una novela de suspense con la que se puede disfrutar y aprender sobre prehistoria sin ningún esfuerzo.

Puntuación: ⭐⭐⭐⭐